miércoles, 5 de septiembre de 2012

Quiéreme como se quiere por primera vez.



A lo largo de mi vida sacerdotal, me ha tocado preparar parejas de novios dispuestos a casarse.... me ha tocado de todo..., pero con alegría constato que ahí donde ambos tienen en su propio hogar un testimonio vivo de lo que es el matrimonio en sus papás, ya viene con ciertas bases para iniciar la gran aventura de sus vidas.

Como un botón de muestra, les comento que en casa he visto a lo largo de estos casi 52 años de casados de mis padres que sus vidas se han consumido en la fidelidad y en el amor, nacimos 6 hijos, de los cuales dos tenemos el privilegio de haber sido ordenados sacerdotes y el resto viven su vocación matrimonial. Hemos sido una familia muy unida aún a pesar de las dificultades cotidianas de la vida, creo que la clave ha sido muy sencilla. Estar cerca de Dios, en Él han consolidado su amor, ha sido su cimento y fortaleza para que nosotros sus hijos aprendamos lo que es la familia

He aquí un hermoso decálogo que nos puede ayudar a todos a renovar ese primer amor que se prometieron ante el altar del Señor.


1.-Nunca se enfaden los dos al mismo tiempo.
Implica mucha sabiduría y prudencia la fortaleza y dominio para controlar la ira que sentimos cuando estamos discutiendo.

2.- Nunca se griten
Moderación, educación y respeto ante todo, el grito es en sí mismo una agresión, independiente de lo que se diga. Se vale gritar sólo si la casa se está quemando..

3.- Si alguien tiene que vencer en una discusión, deja que sea el otro.
La aparente derrota es, en realidad, una gran victoria sobre nosotros mismos. El problema con una discusión es que muchas veces se busca más ganarle a la pareja, que encontrar caminos y soluciones a los problemas.

4.- Si hay que criticar algún defecto o actitud, hazlo con amor y poniendo delante de ti un espejo.
Si por sí mismo resulta doloroso aceptar los propios defectos, más costoso es que nos los tengan que decir. Por eso debemos ser sumamente prudentes y compresivos para criticar o decir algo negativo al otro.

5.- Jamás le eches en cara los errores del pasado.
Comprensión y amor con las debilidades del otro, igual como queremos que sean con nosotros, es la consigna. Víctor Hugo señala en su obra Los Miserables que ser misericordioso es saber dónde están las heridas del otro y no tocarlas.

6.- No admitas el descuido, apatía, el “todo por costumbre”.
En el amor debe existir una sana exigencia. Siempre tenemos que buscar lo mejor para la persona que amamos, aunque a veces sea necesario exigirle. Cuando no amamos nos da igual si la persona se supera o no, pero con la persona amada esto jamás puede llegar a suceder.

7.- Nunca se acuesten con algún problema sin resolver y pídanse perdón.
Humildad para hablar, para aceptar lo que de culpa nos corresponde en cada desacuerdo. Olvidar los resentimientos y rencores, confiar en la pareja y prepararse para el perdón.

8- Recuerda decirle, por lo menos una vez en el día, algo cariñoso a tu pareja.
Cuidar los detalles, los mismos que a veces se pierden con los años. Si ellos faltan, el matrimonio comienza a vivir según las circunstancias y no por el amor.

9.- Cuando te equivoques, admítelo y pide disculpas.
Para muchos el pedir disculpas equivale a una humillación, pero NO: Es grande el que reconoce que es un ser humano con debilidades y defectos y que lucha cada día por superarse. Dos no pelean si uno no quiere y el que está equivocado es el que más habla o grita.
Por lógica, quién está más calmado ve las cosas con mayor claridad y podrá ceder con más tranquilidad y paz interior.

10.-Todo esto son buenas y prácticas ideas para hacer crecer el amor y la admiración hacia el otro, a la que habría que añadir otra que es la más importante: EN EL CONFLICTO, SI SE MIRA A DIOS, APARECEN CIEN RAZONES PARA SEGUIR ADELANTE. EN LA FELICIDAD, SI SE MIRA A DIOS, TODO SE VE COMO UNA BENDICIÓN DE ÉL.

Quiéranse como si fuera la primera vez, aquí les dejo este video y la letra muy conmovedora, cuando se dice con el corazón.

http://www.youtube.com/watch?v=b8VdfmoMFes&feature=share







Agua del arroyo blanco,
Agua pa saciar mis labios,
Agua de tu primavera, de mi zalamera pa mi corazón
Eres para mí como agua clara,
Que corre hacia mi corazón como un río
Que nada y que muere en el fondo del mar.
Eres para mi como la luna, desnuda ante la noche.
Guiando mis pasos hasta el amanecer. Siempre para mi eres lo primero.
Aunque falte el dinero te quiero.
Yo sin oro ni plata te espero hasta el atardecer.
Tu serás la calma y el consuelo y el aire que me falta algunas veces
Agua del arroyo blanco
Agua pa saciar mi sed.

QUIÉREME,
COMO SE QUIERE POR PRIMERA VEZ, QUIÉREME
QUIÉREME,
PARA LOS RESTOS DE LA VIDA
Y QUIÉREME
COMO SE QUE TÚ LO HACÍAS
Y QUIÉREME DE NOCHE, QUIÉREME DE DIA,
QUIÉREME
COMO SE QUIERE POR PRIMERA VEZ, QUIÉREME
QUIÉREME PARA LOS RESTOS DE LA VIDA.
QUEDATE QUE MI ALMA ES UNA BULERÍA.

Agua del arroyo blanco,
Agua pa saciar mis labios, agua de tu primavera,
De mi zalamera pa mi corazón.
Te susurraré mil veces al oído que jamás buscaré nada fuera de ti
Jamás besaré como te beso a ti, créeme.
Créeme porque es tan cierto lo que digo como lo es el sentimiento de un suspiro
Como el frío que siente tu piel,
Sin abrigo, sin besos, sin sed.

QUIÉREME...

Pero déjate llevar
Por el sueño que una vez vivimos, que una vez te di.

QUIÉREME,
COMO SE QUIERE POR PRIMERA VEZ, QUIÉREME
QUIÉREME
PARA LOS RESTOS DE LA VIDA
QUIÉREME
COMO SE QUE TU LO HACÍAS
Y QUIÉREME DE NOCHE QUIÉREME DE DÍA
PORQUE TE QUERRÉ
AUNQUE TE CUESTE SONREIR, AMOR TE QUERRÉ
TE DARÉ
A PUÑADITOS LAS CARICIAS.
QUEDATE QUE MI ALMA ES UNA BULERIA.

Oh, no








1 comentario:

  1. Hermoso matrimonio !!!!!! me emociona cada vez que veo el video, linda canción cantada con el corazón enamorado!!!!

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